Hoy os presento esta equilibrada dieta de musculación cuyo fin primero es el volumen muscular. Como ya hice en anteriores planteamientos, intentaré hacer un breve desglose de los elementos que la componen con el objeto de aclararos por qué esta dieta va a ayudarnos en nuestro proceso de musculación.
Desayuno:
- Zumo de naranja natural o de pomelo
- 1 tazón de leche semidesnatada y cereales integrales
Media mañana:
- Bocadillo de atún
- 1 pieza de fruta
Almuerzo:
- 80 gr. de pasta, arroz o legumbres
- Carne (pollo o pavo) o pescado acompañado de verduras
- Pan
- 1 plátano
Merienda:
- 30 gr. de frutos secos
- 1 yogur desnatado
- 1 sándwich de pavo y queso
Cena:
- Verduras con patatas cocidas
- Pescado, carne (pollo o pavo) o huevo
- Pan
- 1 pieza de fruta
Antes de acostarse:
- 1 yogur desnatado
Como podemos observar, los pilares de toda dieta de musculación son:
- Aporte moderado de carbohidratos: de IG medio-bajo con forme se acercan las horas de menor actividad y medio-alto cuando nuestra actividad es mayor.
- Correcto suministro de proteína necesarios para hacer frente al desgaste provocado en las fibras musculares y tejidos por la realización de nuestros ejercicios de musculación.
- Amplio aporte de vitaminas, minerales y micronutrientes provenientes de frutas. Las cuales, además, nos ayudarán con la reposición de líquidos, factor importante en la recuperación muscular.
- Consumo equilibrado de grasas buenas como el omega 3 contenida en el pescado.
Importante, en toda dieta de musculación el consumo de grasas, puesto que influyen en la correcta regulación de las hormonas anabólicas.
Como vemos, una dieta equilibrada y sana también puede ser más que apta si nuestro fin es la musculación, bien estemos hablando de un proceso de volumen, bien de definición. Esto lo marcará, sobre todo, las cantidades empleadas.