La flora intestinal está formada por un complejo ecosistema en el que cohabitan unos microorganismos que son beneficiosos para nuestra salud, las bacterias prebióticas, otros que no son ni beneficios ni ser perjudiciales, son los saprófitos o comensales y otros que son patógenos.
Estos microorganismos defienden al intestino de posibles infecciones, ayudan a digerir los alimentos difíciles de digerir, como las fibras, ya que producen ácidos grasos de cadena corta, que son una fuente de energía para algunos órganos, como el hígado, los músculos y el colon. También contribuyen a la producción de vitamina K. Estimula el sistema inmune, sintetizan las vitaminas y favorecer la absorción del calcio, hierro y magnesio.
Equilibrio de la flora intestinal, cómo conseguirlo
Para conseguir el equilibrio de la flora intestinal necesitamos tener hábitos alimentarios más saludables. Los nutricionistas recomiendan que la ingesta de los alimentos se reparta en cinco comidas al día, en las que se incluyan grandes cantidades de frutas, verduras, cereales y legumbres, respetando siempre los horarios.
Para conseguir el equilibrio de la flora intestinal, necesitamos que no proliferen las bacterias indeseables, lo que conseguiremos con la canela, en cuyos componentes encontramos el cinamaldehido y el eugenol, con propiedades antifúngicas y antibacterianas que no afectan a las bacterias intestinales beneficiosas. Las hojas de olivo, con potentes efectos antimicrobianos, tanto frente a las bacterias como frente a los hongos, el cardamomo, que contiene aceites esenciales de limoneno, cineol, terpineol y borneol, que, además, combate la halitosis y las semillas de hinojo, que contienen acetol, una sustancia que inhibe los espasmos intestinales, también son muy indicadas para mantener el equilibrio de la flora intestinal.
Puedes tromar también suplementos de parafarmacia que son recomendados para la mejora de la flora intestinal, cómo simbioline vientre plano, que entre otras cosas ayuda a gente intolerante a la lactosa, gente que está tomando antibióticos y más.
Es muy recomendable que introduzcamos en nuestra alimentación alimentos o complementos alimenticios que contengan prebióticos y probióticos para restablecer el equilibrio de la flora intestinal. Los probióticos son suplementos que contienen bacterias vivas, bifidobacterias y lactobacilos, que favorecen la salud y el bienestar. Los prebióticos, fructooligosacáridos, son unidades de fructosa y glucosa que mejoran la composición de la flora y su actividad. También para restablecer el equilibrio de la flora intestinal actúan favorececiendo la eliminación de sustancias toxicas y cuidan del estado de la mucosa intestinal. Las alcachofas, las legumbres, la patatas, el ajo, la cebolla, el puerro, el trigo, la avena, la cebada, los espárragos, entre otros, contienen prebióticos.