La mayoría de las dietas, debido a la influencia en la nutrición moderna de estudios poco concluyentes, eliminan por completo el sodio de entre sus elementos.
La sal, si bien es verdad que, en presencia de un alto porcentaje de grasa puede ser muy perjudicial, en una dieta equilibrada y saludable es más que necesaria. De hecho, juega un rol decisivo en el desarrollo muscular.
Veamos esto de forma un poco más técnica:
El sodio cumple la función de regular el torrente sanguíneo, el equilibrio ácido-base del organismo, las funciones muscular y nerviosa y la actividad de la hidrólisis del ATP en el músculo esquelético.
Cuando sacamos al sodio de la ecuación, nuestro organismo, rápidamente lo contrarresta reteniendo una cantidad mayor de sodio a la vez que libera una mayor de potasio, disminuyendo, también, el volumen de las células musculares. Cuando aumentamos la ingesta de sodio, el organismo compensa reteniendo más potasio y, por ende, aumentando el torrente intramuscular y la excreción de sodio.
Por tanto, ¿cómo influye el sodio en nuestro organismo?
- Gracias al aumento del torrente de células musculares, conseguimos un aumento del tamaño muscular.
- Por este mismo aumento en el fluido, aumenta el intercambio entre proteínas, promoviendo la nueva formación de tejido magro. (músculo).
- Maximiza el potencial de las articulaciones influyendo de forma directa en la fuerza, lográndolo con una mayor sobrecarga.
- Disminuye la probabilidad de desgarre muscular previniendo las posibles lesiones en el tejido blando y conectivo.
- Existe un gran número de aminoácidos sodio-dependientes; esto es, necesitan la existencia de una molécula de este elemento para lograr entrar a la célula muscular.
Como veis, no son pocas las ventajas musculares de nuestro eterno enemigo el sodio. Os recalcamos que todas estas ventajas de un consumo MODERADO de sodio se deben dar en unas condiciones óptimas e alimentación. Si por algo se ha mortificado al sodio es por ir incluido en altas cantidades en comidas basada en grasas transgénicas y carbohidratos de alto índice glucémico, de ahí, su fama. Como es evidente, alimentos así, no son sanos para el organismo en presencia de ningún otro mineral, micronutriente o macronutriente.