La stevia es el nombre común de los extractos de la planta Stevia rebaudiana. En los Estados Unidos, una forma purificada del componente de la planta, llamado rebaudiósido A o rebiana, está reconocido como seguro por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y puede ser usado como un edulcorante artificial en alimentos y bebidas. Su poder endulzante es muy alto y su contenido calórico, nulo.
La stevia se comercializa bajo los nombres comerciales de Truvia, PureVia y SweetLeaf. A pesar de estos tres nombres diferentes, el edulcorante es esencialmente el mismo, aunque cada uno contiene proporciones ligeramente diferentes de rebaudiósido A. Su capacidad endulzante es la misma y, como ventaja frente a otras alternativas al azúcar, se encuentra su sabor natural y envolvente.
Algunos preparados a base de stevia están considerados como edulcorantes no nutritivos y, como tales, su uso está especialmente recomendado para todas a las personas que intentan perder peso. Su ausencia total de calorías lo hace apto para su uso en dietas hipocalóricas.
Sin embargo, no hay evidencias que demuestren que la stevia es mejor para perder peso que cualquier otro edulcorante. Aunque todos los alimentos que se consuman no tengan azúcar, es posible ganar peso si se consumen otros alimentos de alto contenido calórico. Además, estos extractos de stevia altamente refinados pueden provocar efectos secundarios leves, como náuseas o sensación de hinchazón.
Todavía no se ha estudiado lo suficiente el uso de las hojas de stevia como aditivos alimentarios. Son escasos los estudios a largo plazo que se han realizado para documentar sus efectos sobre la salud en seres humanos. Según algunas investigaciones, parece que tomar stevia directamente de la planta podría afectar a la estabilidad de los niveles de azúcar en sangre, a los riñones e incluso al sistema cardiovascular y reproductivo.
Con todo, el sabor dulce de la stevia y sus orígenes totalmente naturales lo convierten en un sustituto del azúcar cada vez más popular. La stevia, como cualquier otro sustituto del azúcar, puede ayudar a controlar el peso, pero no es la panacea y debe usarse con moderación. Tomado en cantidades razonables, la stevia puede ser una excelente alternativa al azúcar.
